sábado, 13 de marzo de 2010

Luciérnagas

Como podría estar tan cansado, si apenas había hecho algo esa misma mañana, es más…me había despertado tarde debido a mis largas noches trasnochando trabajando en mi investigación. La llevo bastante bien, parece que por las noches estoy más centrado y avanzo más rápido a la hora de tomar mis notas sobre los distintos tipos de mariposas que se encontraban en el bosque.

Aquella misma tarde observé a una “alas de pájaro” llevaba días detrás de aquel bicho (no se merece otro nombre porque llegó a desesperarme su búsqueda, día tras día perdido por el bosque sólo para observar su comportamiento ¬¬), pero bueno al final el esfuerzo mereció la pena. La “alas de pájaro” es una de las mariposas más grandes y bonitas de entre todas sus especies, sus intensos colores han despertado mi atención en más de una vez y me sorprendió mucho mucho ver una por primer vez. Bueno no os aburro más con mis pensamientos de investigador.

Ahora mismo vivo en una casita de madera cerca del riachuelo, tengo muchísimos tipos de plantas, arbustos y árboles alrededor. Todas las mañanas intento cuidar mi pequeño huerto de bayas silvestres, son de esas rojas que están deliciosas y manchan.
La casa es sencilla, pero tiene lo fundamental, una chimenea una cama blandita y calentita y un sillón de esos que estás medio acostado en ellos, que son como un gran cojín. La televisión no existe en mi vida en el bosque, la poca tecnología que tengo es una pequeña radio y mi reproductor de música (que si me quitan eso me muero). Ah!! Y luces, luces también tengo, dos lámparas, aunque tengo que añadir que siempre sentí debilidad por las velas y las lámparas de aceite, su luz es menos intensa y por lo tanto más relajante, cosa que necesito para llevar a cabo mi ardua tarea.

Mi vida se centra prácticamente en mi habitación, allí tengo la radio y la cama, el sillón la chimenea y mi expositor de mariposas…sólo me falta la “alas de pájaro” por eso quiero capturar una…pero me da lástima hacerlo, porque entonces tendré que dejar este lugar y lo que sí os puedo decir que vivir así es de lo mejor del mundo 

Uiis!! Esperad, llaman a la puerta, será Alice.

Sí, coma era Alice, no sabéis quién es?? Pues utilizad un poco la imaginación hombre…
No, no es mi novia, aunque es guapa ha de reconocerlo…y sus ojos son del color del ébano, sí la verdad es que Alice es muy guapa…
Ella es mi ayudante, nos llevamos bien, me ayuda en el huerto y en la toma de notas y observación de mariposas, gracias a ella ahora en mi expositor tengo a una mariposa tigre. Vale, me gusta Alice y qué!! Hum!! Nosotros somos algo raro, necesitamos nuestro cariño mutuo y necesitamos abrazarnos y querernos…Pero a ver porqué os tengo yo que estar dando explicaciones, venga callaros. Y no me entretengáis más, que no termino nunca ¬¬
Veis, ya no sé por donde iba…
En fin…que vivo en una casa de madera cerca del…no esperad si eso ya lo he dicho!! ¬¬

Ya, ya me acuerdo, os contaba que no quería irme de aquel lugar, pues bien, aquí se respira tranquilidad, no te preocupa el tiempo, porque no existe en mi vida, siempre he dicho que somos esclavos del tiempo y como yo odio serlo pues no tengo relojes en casa. Y claro...siempre que pueda quedarme más tiempo con Alice mejor que mejor, porque a ella le gusta ser mi ayudante y dejarme respirar de vez en cuando.

Alice me llama para cenar, enseguida vuelvo!!

Vale, ya estoy aquí, si, sí me he lavado los dientes, porqué pensáis tan mal de mí ¬¬
Esta noche toca búsqueda, saldré al bosque a buscar una “alas de pájaro”. Esta noche me da igual pasarla entera buscándola, total no tengo nada de sueño y me gusta pasear por el bosque porque tiene una aura especial y la luna llena nunca deja que me quede a oscuras, con lo que el bosque adquiere una luminiscencia que me encanta.

Cuando salí de casa, sería como medianoche, siempre intentaba seguir las rutas donde era más probable encontrar a alguna, pero esa noche decidí perderme en el bosque, a Alice nunca le gustó que saliera de noche, siempre me abrazaba cuando llegaba con los ojos llorosos…en el fondo creo que nos gustamos, pero es difícil saberlo, llegué a un claro y busqué por las cortezas de los árboles cualquier indicio o cualquier movimiento de mariposas, llevaba mi red por supuesto, mi blog de notas y una especie de gafas con aumentos. Pasé el claro y decidí ir por una zona que bajaba como a un gran árbol lleno de hojas caídas, pensé que a lo mejor desde allí veía alguna ruta más adecuada pero por más que buscaba y buscaba pasaba lo de siempre, la mariposa no aparecía y yo volvía a estar exhausto.

Me acosté sobre un tronco que parecía cómodo a descansar la vista un poco y enseguida me dormí...Juraría que estuve días durmiendo pero simplemente fueron un par de horas. Me acostumbré al ambiente nocturno, despejé la vista y me dispuse a proseguir con la investigación. Pero cuando me fijé en el lugar que estaba me dí cuenta de que no era el mismo en el que me había dormido, había…estaba….todo estaba lleno de luciérnagas, luciérnagas que iluminaban el bosque con su suave resplandor, que volaban danzantes en la noche…era precios, nunca había visto tantas….y entónces me fijé en un susurro del viento, una ligera brisa que pasó delante de mi cara y se vino a posar en un árbol cercano…Ahí estaba, mis meses de estudios podrían estar acabando si atrapara a aquella mariposa…pero …era tan bonita…movía las alas estando posada en el árbol y parecía estar paseando por entre los vientos helados del bosque me levanté con sumo cuidado, y cogí la red de mi espalda, la alcé y la atrapé…No podía creer lo que veían mis ojos, al fin había capturado a una “alas de pájaro”, todas las noches sin dormir, todos los apuntes y los estudios, las consultas sobre su localización…todo había acabado.
Cuando la metí en el frasco vi pasar todos mis recuerdos como un tornado en mi cabeza si capturaba a la mariposa me tendría que ir de allí…dejaría a Alice y al bosque…

La solté, solté algo que llevaba meses buscando, solté la clave de mi éxito y la salté porque quería a Alice…

Cuando llegué a casa ella me abrazó como siempre, y me preguntó si había habido suerte y le dije que no…que no había capturado nada…y ella me rodeó con sus delicados brazos y se apoyó en mí en el sofá…”No te preocupes” me decía todas las noches, “seguro que mañana habrá suerte” pero ella se moría por dentro cuando me lo decía, porque no quería separarse de mí…y por eso no quería que fuera todas las noches a buscarla…porque en el momento en el que la atrapara, es posible que no volviéramos a vernos más, mira…Alan…¿porqué no dejas esto? Sabes que será imposible que la captures…hay muy pocos que lo han logrado y yo no quiero verte triste…
Que bonica era cuando me decía cosas bonitas, la besé.
Fue un acto que hice sin pensar, nunca le había dicho lo que sentía por ella, pero al besé y ese beso si fue el más largo del mundo…

Desde ese momento salía todas las noches a buscar de nuevo la mariposa al mismo sitio siempre la veía, siempre la capturaba y siempre la soltaba, siempre pensaba en Alice y en lo feliz que íbamos a ser juntos en el bosque porque la investigación…¿que importancia tenía comparada con ella?

Por las noches siempre salía con ella a ver las luciérnagas y a ver la mariposa…pensando en lo fácil que sería acabar con todo…pensando en el próximo beso que nos daríamos y en lo afortunados que éramos por estar en ese bosque…porque Alice era aquella chica de las mariposas….





2 comentarios:

  1. mmm añade Alice a tu lista de nombres bonitos :)
    y añade Luciérnagas a tu lista de textos bonitos ;)

    un besito Javi ^^

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  2. María de Beniel ^^domingo, 04 abril, 2010

    Muy bonito, Javi :D

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Ecos del pasado