viernes, 26 de octubre de 2012

Rainy lake

Imagina estar en un lago.

Imagina que las nubes empiezan a oscurecerlo. Un poco más gris, un poco más nórdico.

¿Recuerdas aquella película? Había cientos de cisnes nadando y ninguno se apartaba a nuestro paso.

La canoa surcaba aquel manto blanco de aves y la lluvia es a quién nosotros sorprende.

Bajamos empapados, justo en una orilla, cerca del granero.
Coges mi mano y corres divertida.

Me encanta tu sonrisa.

Nos pegamos a la pared. Allí nos guarecemos.
Me arrastras hacia otra pared, donde ahora nos mojamos.

Me callas con un suspiro. Un atrevimiento cercano.

Imagina estar bebiendo, de nosotros, en aquel lago.

viernes, 19 de octubre de 2012

Nature

Un día desolador. Desolador porque aún no hay sol. Sólo nubes que cubren en su totalidad el cielo. “Nublado”, dicen.

Me acerqué temprano a las montañas. El valle estaba oscuro.
No me gustaba perderme las salidas del sol en octubre. Suelen ser más animadas que en cualquier otra época del año. Sólo mayo podría competir con octubre, pero nada más lejos de la realidad.

Porté un poncho bordado, mis botas altas, y mis pantalones de expedicionaria. No olvidé mis guantes de lana, el pañuelo rojo de mi abuela y mis orejeras. Hacía frío por las mañanas. Por ello, cogí también un termo con un poco de té y galletas integrales. Esperé.

Aquel lugar amanecía todos los años tal y como imaginaba una y otra vez. Aunque pasara el tiempo, cada año era mejor y mejor. Siempre mis aspiraciones quedaban superadas. No puedo nunca dejar de pensar en un cuadro de Friedrich que vi cuando era pequeña y que estoy segura de que él visitó estas montañas para inspirarse.

El aire es puro y algunos animalillos corren juguetones.
Una ardilla se quedó mirándome. Me hacen gracia esos animales. ¡Cómo me gustaría poder domesticar una! La llevaría en mi hombro todo el día. Excepto cuando ella quisiera bajarse, entonces la dejaría ser libre. Aunque no me gustaría que me dejara.

Un rayo de luz cruzó mi frente hasta llegar a mis ojos que se iluminaron durante un instante. Sonreí animada.
Ahora es el momento de sentir y observar cómo el mundo vuelve a nacer.

 
Hay días más especiales que otros. los nublados y lluviosos lo son. Pero sin viento, por favor.



lunes, 8 de octubre de 2012

Estrellas

¿Recuerdas las noches llenas de estrellas? Tu habías pedido un deseo cuando una estrella fugaz cruzó el cielo en un instante. Me contagiaste tu felicidad.

Es probable que no sea el más original si te digo que tienes una bonita sonrisa, pero al fin y al cabo, ¿por qué esconder tal verdad? Brilla como aquel deseo que pediste, o como aquellos muchos otros que yo también pedí.

Hay veces que abrazo a la nada. O que respiro el perfume que ya olvidé.
No soporto imaginarte tan lejos. Me llena de tristeza no recordarte todo lo bien que quiero.

Me hice prometer mantenerte cerca de mí y es justo lo que pretendo. No puedo tocarte, ni mirarte directamente a los ojos, ni besarte. No puedo envolverme en ti, ni sentir tu respiración, pero intentaré llevarte a mi lado, hasta donde tu quieras. Bella.

[Je me souviens encore de mon coeur battant très forte quand tu m'ai serrée dans tes bras]

viernes, 5 de octubre de 2012

Proceso

Miras cómo ocurre tu vida en una secuencia de flashes infinita. Un sentimiento te oprime el pecho y la sangre se torna de un color negruzco que acelera tus pulsaciones. Poco a poco, al final del proceso, se sustituirá por ira. Los dientes los aprietas unos con otros. Se entrecorta tu respiración.

Dos manchas oscuras recubren parte de tus brazos y dejas escapar un leve gruñido que sacude tu garganta. Aún no está preparada para gritar.

Las pupilas se dilatan. Te animalizas. Sientes cómo te vacías lentamente de aquellos incómodos sentimientos que condicionan tu toma de decisiones.

Pierdes equilibrio vertical. Un arco cruza tu columna vertebral.
Todo tu cuerpo se convulsiona con fuerza con cada intento de tomar una bocanada de aire que permita horrorizar a cualquiera. La musculatura se tensa.

Algo explota en tu interior. Caes al suelo rendido y abres los ojos, aún hiperventilando.
Ves que eres diferente. Más fiero.

El proceso se completa.

Sonríes irónico impulsado por una extraña confianza.
Ensalzas tus nuevas cualidades.

Te camuflas entre las sombras. Oscuro eres.

Sientes que algo has hecho mal y te regocijas de tu derrota.